1.12.25

A la distancia

Toda mi colonia se ha quedado sin electricidad. Me he asomado y nada. La vecina de arriba dice que no hubo anuncios en redes, o en la tortillería para estos casos, avisando de un corte. Está tan de la chingada el frío que en una de esas le pasó algo a un transformador, espeta otro vecino. No mames, Ramón, eso no pasa... ¡Habrá que ver que tonteras se te ocurren! Me despido y entro a casa mientras los vecinos se ríen y gritan. No hay música porque olvidé bajar nuevas listas esta mañana. No hay lectura porque ya son las 7 en invierno y se me joden los ojos de ardor por leer a la luz de una vela. No hay café porque malditas ganas de que sea de grano todo el tiempo y no guardo soluble en la alacena. Así que me tumbo en la cama aunque no tenga sueño, cierro los ojos, e indiferentemente como cada vez que hay silencio, mis pensamientos derivan en ti. Recuerdo la primera vez que me miraste de una forma distinta, como si notases algo nuevo por primera vez. Tu sonrisa era un simple esbozo. Pero tus ojos... Ellos jamás me pudieron mentir. Me bañaban en emoción cada vez que nos veíamos a escondidas, cada vez que despertamos juntos, cada beso apasionado o no. No importaba qué más te hubiese emocionado en la vida, yo me sentía cual Mercurio observado por el Sol. Mi perros comienzan a chillar que quieren salir, que necesitan salir al baño, pero no quiero hacerles caso. Porque abrirlos sería perderte porque sabré que no estás aquí, en esta perfecta oscuridad en la que podría dormir contigo, sentir tu alocado pelo contra mi nariz, oler tu piel, notar como te aprietas contra mí cuando sientes frío. Maldita sea, murmuro mientras me pongo de pie y voy hacia la puerta trasera. Pongo las correas, tomo la bolsa para los desechos, y salgo a caminar con aquellos que me rescataron hace unos años. El cielo se ve tan azul, sin estrellas, sin aviones,  sin aves, y con una luna tan perfecta que no puedo evitar responderle con una sonrisa.

27.11.25

 No sólo te lo he ofrecido, sino te lo he dado ya. En el frío y la desesperanza, en la penumbra y con la cabeza gacha; entre trinos de aves y caminatas al sol; en una noche juntos, y cuando fumo solo al amanecer. Porque los rostros de la gente por la calle cobran sentido cuando ninguno es el tuyo. Porque el aliento es sólo aire cuando no es un ventarrón de deseo viniendo de tus labios. Porque mi cuerpo es simple matemática sino eres tú quien me lleva de la mano.

Celoso fui de querer volverme a enamorar. Qué me parta un rayo si me dejo, si me alcanzan. Lo dijo Whitman, me canto a mí mismo, y lo demás no importa. Soy dueño de mi sexo, de mis miradas, de mis voces, de mis textos. Si a alguien intereso, que me busquen, me seduzcan, me convenzan. Yo soy el que soy, y nada más. Ja, pésimo sentido del humor el mío, porque me doy cuenta de que simplemente esperaba por ti.

Mi corazón es tuyo, así como mis labios marcados con tu nombre y mis ojos nacarados con tus rostro. Cerezo que da sombra, la luna creciente, el primer sorbo de café, seré lo que quieras. Pilar de sal después de pecar juntos, el humo de un cigarro en la madrugada.

No sólo lo he ofrecido, sino lo he entregado ya. Si lo dudas, simplemente cierra los ojos, pon tu mano en tu pecho desnudo, y di mi nombre. 

24.11.25

Pequeño cuento para antes de dormir

Temeroso pequeño oso rojo

A beber del río

En tenebrosa noche.


Miró el creciente de la azul luna

En el agua, sonriente

Y pudo sonreírle de vuelta.

Extrañándote nomás

Quisiera estar allá, arropado junto a ti en este jodido frío. Parándome para servirte café, para hacerte el desayuno. Güey, alguien te va a escribir, me dices. Ay, por 10 minutos se pueden ir al diablo, te respondo. Hago huevito, pico algo de fruta, y regreso a ti, con las manos llenas, a punto de caerme, y ríes mientras me ayudas a ponerlo todo donde estamos.

Extrañarte no es dolor. No es hacer rabieta, y bufar porque no te veo. Extrañarte es querer estar contigo para perder la noción tiempo e imaginar constelaciones en tu cuerpo. Extrañarte es tocar mi pecho y finalmente sentir algo en ese lugar hacia la izquierda del mismo.

Podría llenar este texto de 'quisieras,' mas creo un poco es insulto a lo que siento. Así que quiero estar contigo, sintiéndote cuando recorro tu pelo con mis dedos y besándote en la sien cuando me pongo de pie y te sirvo un poco más de café. Quiero hurgar tus rincones con mi lengua, perdiéndome en el cielo azul que es tu cuerpo. Oír que mientas madres de la gente, y cómo hablas de lo mucho que retumba un chelo en tu pecho. Sentir tu aliento detrás de mis orejas porque me abrazas por detrás. Voltearme y besarte sin mirarte. Quiero bañarme en ti, contigo, con mis labios en tus párpados, y mi dedo en tu sexo. Quiero ignorar la soledad que me acongoja a veces porque me sentí solo tanto tiempo. Ven, y platiquemos un momento, me dice. Y la ignoro porque reflejarme en el mar que son tus ojos es lo único que quiero.

Ven, me dices. Desayuna conmigo. Me siento, y vemos el día pasar.

23.11.25

 Si así ardí por 24 horas, no puedo imaginar cómo será de aquí hasta que el universo se contraiga y explote una vez más...

22.11.25

 I do not even know what the time is. Kind of hungover. Sleep deprived. Pulsations of the beat I used to fuck you. Torn lingual frenulum. Sex-lagged all over. Indomitable fire.

 I stink of you, sex of gods, cascades of atoms, arms around me, verbs of passion, no nouns at all. I stink of you, bird of sorrow. Counting hours is not my thing, but as to waiting for you is all I got, it is 57 before I can...

Tu azul siendo tan cálido

 Tiemblo aunque voy sentado. No es el vaivén del tren. Ni los vestigios de alcohol en mi sistema. Eres tú y tu voz pulsar. Es tu sexo tan salado y tu piel erizada por mis labios. Olvidé mis anteojos, aunque no importa tanto. Quiero sólo ver hacia adentro de mí, en la oscuridad terrible, y ver tus ojos, tus labios. Insoportable calor. Y no es por la gruesa gorra que apenas amilana mi hirsuto cabello, o el desparrame de gente en el vagón. Es porque ardí contigo. Encendiose eternamente por 24 horas mi maltrecho cuerpo. Y sigo en combustión, con tu humor atrapado en mi piel y tu sabor atomizando mis labios. Te veo todavía, vestigio del sol al cerrar los ojos al mediodía. Te beso aunque sé ya vas lejos. Tiemblo. Tiemblo! Tal vez dos horas y llego a casa. En automático sonriendo ya que, ¡demonios! Pensar en ti es suficiente razón causa en esta lenta tarde de otoño.

21.11.25

 Yeah

Today

I'm about to short circuit 

30.5.25

 I hate you. I hate how you make me think of the Milky Way. How I burn when you fucking look at me. How you fucking push me to make out with someone else. How I think over and over that you know, that you don't, that you need to push me away, that you itch, that you hate me too, that you yearn to tear me. I hate that I want you. I hate that you don't. I hate that you give twice as much two shits that I can't have you. And that still do you need me to see you as the cluster of stars that won't brighten your morning. I hate that I say no, then yes, then no.

Would you have me? You know, like a sip of coffee at nine in the morning. Like, you know, like something you never had.

No one else is nothing. Someone else is something, but never you.

I was like, you do know, like you were going to take me and like say, Lie with me, sleep with me, make me breakfast, ignore me, leave, send me a song, wish me a good day, say my name, say my name one, two, three, five, thirteen, forty seven times my name, call me sweetheart without my permission, suffer, and start all over the morning after. Cause I can comply non-stop. Cause you know it and you know it and you'll smile and you'll smile.

And... And I don't know what else to type.